A medida que vamos atravesando las múltiples fases de esta crisis, un factor se ha destacado: nuestro fortalecido sentido hacia la comunidad. Este dinamismo de colaboración global está impactando la reacción de los negocios a través de la cadena de suministro global.

Alejandro Canela, vicepresidente y country manager de Siemens Digital Industry Software para México y Centroamérica.
» Alejandro Canela, vicepresidente y country manager de Siemens Digital Industry Software para México y Centroamérica.
Esta experiencia está cambiando nuestra mentalidad colectiva impactando a todas las industrias de forma prolongada, lo que probablemente se traducirá en más entornos de colaboración y más flexibilidad. En la fabricación, las tendencias de colaboración como el crowdsourcing cambiarán la forma en que construimos, diseñamos y entrecruzamos las ideas de los especialistas, eliminando nuestros límites funcionales.

Por lo general, los extraños efectos que hemos visto en el comportamiento de compras y las reacciones de los consumidores están interrumpiendo de manera radical la planificación de la fabricación, la cual se está deteniendo o acelerando rápidamente - sin mucho entremedio - generando un efecto dominó a lo largo de la cadena de suministro.

Uno de los elementos más importantes que afectan la capacidad de los fabricantes para actuar en estas circunstancias es el tamaño. Los fabricantes pequeños y medianos con cadenas de suministro predominantemente locales han sido los menos equipados para hacerle frente a la situación actual. Mientras que los grandes tienen un nivel diferente de preparación y alternativas.

¿Cómo afectará esto al futuro de la industria?


Bueno, nadie estaba preparado para esto. La abrupta y ubicua pandemia ha creado una tormenta perfecta. Se ha tocado fondo tras la demanda del mercado a nivel mundial, mientras que las cadenas de suministro se están interrumpiendo en todo el mundo. A medida que volvamos a la normalidad, los fabricantes replantearán la forma en que han organizado sus procesos y sus cadenas de suministro, lo que son brechas críticas en su infraestructura digital. Habrá una urgencia permanente en torno a la presión de los costos y los márgenes.

Los esfuerzos de transformación digital se acelerarán drásticamente para crear una empresa de fabricación más ágil que pueda responder a los cambios del mercado con más velocidad y flexibilidad. Los fabricantes pueden utilizar este tiempo de inactividad para reflexionar sobre las prioridades estratégicas sin tener la presión táctica habitual de la demanda del mercado.

Mientras estamos en una situación difícil, debemos observar las oportunidades que tengamos disponibles y aprovechar el tiempo a nuestro favor. Tomarse el tiempo para prepararse no sólo para el arranque, sino para el futuro de sus empresas, es un tiempo bien invertido. La realidad que ahora es más obvia que antes es que los fabricantes deben digitalizar sus procesos. Evidenciado por nuestra situación actual, la transformación digital no es sólo un imperativo competitivo, sino un imperativo existencial.

Ganar visibilidad y transparencia es a menudo lo que sugerimos como primer paso para un fabricante que está trazando su mapa de transformación digital. A partir de ahí, pueden empezar a dar prioridad a la automatización de los procesos, incluyendo las limitaciones de la cadena de suministro, la trazabilidad y la gestión de la calidad, el control y la aplicación de las normas en la planta de producción y, por último, una infraestructura completa de fabricación digital que conecte el diseño y la planificación con la producción. Los fabricantes deberían considerar la posibilidad de modernizar las herramientas, las tecnologías y los procesos que motivan a la próxima generación de empleados, nuevos modelos comerciales que incluyan asociaciones tecnológicas, y una infraestructura digital que apoye el aumento de la capacidad y la eficiencia comercial.

Aunque las cosas estén difíciles, tenemos que buscar oportunidades ocultas y regalos imprevistos. Hay que sacar lo mejor de la situación, aprovechar lo que tiene para ofrecer, y buscar maneras creativas de cómo sacarle el máximo provecho para que podamos salir de esto más rápido y más fuertes que antes.