EN BREVE/
< LM&TH Automoviles se encuentra buscando apoyo del gobierno federal y gobiernos estatales en México para poder llevar a la producción en masa y serie nuestros vehículos. >
Ante los retos marcados por el cambio climático que ha impuesto medidas importantes a las economías globales en la búsqueda de alternativas que reviertan los daños ocasionados al medio ambiente, con energías más limpias y menos emisiones contaminantes.
Cada vez es mayor la conciencia entre los gobiernos, los fabricantes y los consumidores que buscan disminuir la huella de carbono, adoptando hábitos más amigables con el medio ambiente, prueba de ello es el creciente mercado de los vehículos alternativos, entre ellos, los vehículos híbridos, híbridos conectables y los autos eléctricos, mismos que durante 2018 registraron un incremento en ventas de 68.7% en México.

La empresa cuenta con tres tipos de automóviles, el Thalía City, Thalía Funny y Thalía Utility, con lo que responden a tres necesidades diferentes de movilidad.
» La empresa cuenta con tres tipos de automóviles, el Thalía City, Thalía Funny y Thalía Utility, con lo que responden a tres necesidades diferentes de movilidad.
Es por ello que varias compañías han visualizado la opción de ingresar en el negocio del armado de vehículos eléctricos, tal es el caso de LM&TH Automóviles, que desde su sede en Puebla planea comenzar su producción en serie en el año 2020.
Pero, ¿Cómo surgió la idea de ingresar en dicho mercado? Después de ser diseñadores de autos para las grandes armadoras, el equipo de Leopoldo y su compañía Leorda, decidieron dar el siguiente paso y crear sus propios vehículos, con el plus de hacerlos eléctricos.

Isaías Garibay, gerente de ventas de Geart International, empresa creadora de la marca, narra que Dynamach e-motors.
» Isaías Garibay, gerente de ventas de Geart International, empresa creadora de la marca, narra que Dynamach e-motors.
Así nació LM&TH Automóviles, una empresa mexicana, que diseña y fabrica vehículos eléctricos con los que pretenden solucionar los problemas de contaminación y movilidad que existen en nuestro país.
Entrevistado por Somos Industria, Leopoldo Ortiz, CEO de LM&TH Automóviles, relató que todo ocurrió hace casi cinco años cuando, después de haber trabajado por años en el diseño de autos para Volkswagen, Audi y Faraday Future, concluyó que podría hacer su propio vehículo eléctrico.
Con su primera empresa Leorda, se dedicaba a atender a estas armadoras y entonces supo que podrían hacer sus propios modelos.

“Nos dimos cuenta de que teníamos toda la parte de consultoría y diseño de desarrollo, teníamos bastantes expertos y dijimos por qué no hacer nuestro propio vehículo, yo anteriormente manejaba autos de competencia y teníamos un taller donde fabricábamos los vehículos de competencia. Así que decidimos unir todo el know how y el taller para fabricar los vehículos para fabricar los autos”, dijo.
La empresa cuenta con tres tipos de automóviles, el Thalía City, Thalía Funny y Thalía Utility, con lo que responden a tres necesidades diferentes de movilidad.
Thalía City, por ejemplo, es un vehículo para ser utilizado en la ciudad. Cuenta con tres plazas y baterías que ofrecen autonomía de 200 kilómetros. Thalía Funny es un vehículo tipo boogie, ideal para ser utilizado en la playa.

Mientras que Thalía Utility es una camioneta tipo pick up, ideal para mover cargas ligeras.
Para cargarlos, basta conectarlos a una corriente de 110 voltios y con una carga de hasta seis horas, pueden permanecer en movimiento hasta 200 kilómetros.
El CEO de la compañía explicó que en promedio un automóvil recorre de 30 a 40 kilómetros al día en un traslado de ciudad.

“Los vehículos son de tres plazas, su velocidad máxima 80 kilómetros por hora, los motores son de corriente alterna, altamente eficientes, son ultraligeros de 650 kilogramos”, dijo Ortiz quien especificó que el último vehículo que diseñaron para una armadora tiene un peso de 1,380 kilogramos.
Los vehículos Thalía también cuentan con una tecnología Interbody, es decir, que, si el usuario decide cambiar de vehículo, solamente deberá llevarlo de vuelta a la fábrica y ahí le cambiarán la carrocería y los interiores.
“Cambiamos el cascarón y tienes un vehículo totalmente diferente, pero sigues usando el mismo chasis, entonces no pierdes dinero al vender tu vehículo con la depreciación, y con nosotros no es así”, dijo.

Ortiz especificó que los vehículos que ha desarrollado están hechos para competir con otros de esa gama como el Zacua o el Twizy de Renault, aunque a un costo más competitivo, pues los vehículos Thalía tendrían un costo inicial de 18,000 dólares, es decir, poco más de 350,000 pesos.
Se estima que la mayor parte de los componentes que componen el vehículo son mexicanas y de fabricación local , tal es el caso del chasis, carrocería, interiores, componentes mecánicos y accesorios, entre otros.

Además de los modelos Thalía, también se encuentran diseñando un vehículo deportivo, también eléctrico. Un autobús eléctrico que podría alcanzar hasta 80 kilómetros por hora de velocidad, bicicletas eléctricas que ayudarían al usuario a rodar a 30 kilómetros por hora y un triciclo, con capacidades similares a la de la bicicleta.
Hoy en día, la compañía tiene entre 15 y 20 patentes nacionales e internacionales respecto de partes y componentes de sus vehículos.

Sin embargo, para convertirse en una empresa con capacidad para producir vehículos en serie, a LM&TH Automóviles aún le resta un largo camino, principalmente, por la falta de recursos para seguir haciendo pruebas y perfeccionar sus autos.
En la industria automotriz se consideran cinco años para que las armadoras desarrollen un producto, hagan pruebas y mejoren este, hasta que sea lo suficientemente seguro para ser puesto en venta. Y en el caso de los vehículos Thalía, esto ha sido un camino sinuoso, dado que han contado con poco apoyo por parte de los organismos gubernamentales y tampoco han buscado el apoyo de inversionistas.

“Faltan apoyos, no para el desarrollo de autopartes, sino una bolsa destinada a empresas mexicanas para que puedan desarrollar vehículos completos, una bicicleta, un auto, un avión, un dron, siento que apoyar esta tecnología es fundamental para que México se convierta en un país del primer mundo, porque seríamos desarrolladores, desde una pieza hasta los vehículos completos”, declaró.
Debido a los estudios que se han realizado el objetivo de producción durante el primer año son 60 vehículos mensuales y a partir del tercer año son mas de 100 vehículos mensuales. Por lo pronto, la compañía está en el proceso de la fabricación de prototipos.

Fabrican autos desde Querétaro
Otra de las empresas que también ingresó al armado unidades eléctricas en México es Dynamach e-motors, un proyecto queretano dedicado al diseño y fabricación de vehículos eléctricos.
Además de las motocicletas tipo scooter, el producto de mayor venta para la compañía, también cuenta con vehículos de trabajo, de carga, un moto-taxi cerrado de cuatro puertas para cuatro personas, con aire acondicionado y cámara de reversa; así como un moto-taxi abierto, también para cuatro personas y una línea de propósito definido (cuatrimotos).
Isaías Garibay, gerente de ventas de Geart International, empresa creadora de la marca, narra que Dynamach e-motors nació buscando crear un producto que pudiera tener impacto social y en pro del medio ambiente para desahogar el nivel de contaminación por CO2 y la contaminación por ruido.
“Vamos mucho en pro del medio ambiente, tenemos incluso un departamento, dentro de la empresa, Geart International, de diseño para ahorro de energía por medio de la iluminación, con gente certificada, lo que nos provee y nos ayuda a que, a las empresas o industria que le hacemos este tipo de estudios, tengan los 25 puntos para convertirse en edificios verdes”, explicó.

Es por ello, que además de crear un promover un vehículo sin emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, utiliza un 40% de plástico reciclado.
Desde hace cuatro años se comenzó a trabajar en el proyecto, con una inversión inicial de alrededor de 200 mil dólares; aunque apenas hace tres se inició la venta de las primeras motocicletas, contando como los primeros clientes algunas industrias que buscaban alternativas de movilidad dentro de las plantas.

De 2015 a la fecha se han producido más de 400 unidades, teniendo como objetivo elevar la siguiente producción a 700 vehículos para el resto del año.
Isaías Garibay recordó que, por el tipo de mercado al que van dirigidos, se busca llegar primero a la conciencia del comprador, más allá de buscar vender “vehículo tras vehículo”.
Es por ello, que explica que, “migrar a un scooter eléctrico es como aquella persona que fumó y dejó de fumar, te das cuenta primero de tres cosas: que tu economía va a mejorar porque no vas a gastar lo que estabas gastando, que va a ser benéfico para tu salud y en tercera, que ya no vas a contaminar, ni tu cuerpo, ni el medio ambiente”.

Entre las ventajas que ofrece uno de los vehículos Dynamach e-motors, está un rendimiento de 8 horas de uso continuo por 35 centavos de electricidad; además de que, por estar diseñados para transitar dentro de zonas urbanas, el límite de velocidad que alcanzan es de 45 km/h, de acuerdo a normas internacionales, por lo que, al tener un percance, no se pone en riesgo la vida del tripulante.
“Son vehículos de logísticas o distancias predeterminadas, no puede entrar en vías de alta velocidad, que lo mínimo que pide son 60 km/h; sin embargo, para una ciudad con rango delimitado, desahogan tráfico en las zonas conurbadas y ayuda a trasladarse de forma segura a 45 km/h”, expuso.
Además, todos los vehículos de Dynamach Motors cuentan con un GPS de localización satelital y una cámara HD integrada que graba los recorridos para mayor seguridad.

Isaías Garibay señaló que si bien, los productos Dynamach Motors son 100% mexicanos en su diseño y fabricación, actualmente sólo el 60% de su integración es nacional, ya que el motor se importa de China, mientras que los tacómetros y batería se traen desde Taiwán, debido al alto costo que representa adquirirlos en el país.
Sin embargo, adelantó que ya se trabaja de la mano con la Universidad Autónoma de Querétaro, el Instituto Tecnológico de Querétaro, la Universidad Tecnológica de Querétaro, la Universidad Tecnológica de San Juan del Río, además del Clúster de Tecnologías de la Información, Vórtice IT, y con el Centro de Investigación Tecnológico de Zacatecas, con los que se busca darle un nuevo rumbo a la fabricación de vehículos, buscando crear una batería más rentable, el motor y los tacómetros a nivel nacional.

Estimó que para septiembre de 2020 se podrían estar lanzando los primeros intentos de vehículos con esta integración nacional.
Finalmente, informó que actualmente la marca cuenta con puntos de venta en Querétaro, Saltillo, Monterrey y Torreón, y están por abrirse otros en Moroleón y Uriangato, dos de los municipios más exigentes con una gran cultura de uso de motocicleta; así como en Oaxaca. Juchitlán, Tehuantepec, Salina Cruz, Comitán, Fresnillo y Playa del Carmen.

Los costos de las motocicletas eléctricas que ofrece la empresa rondan desde los 34,200 pesos (Mantis) y hasta los 180,000 (foodtruck).



Autos eléctricos en México
De acuerdo con datos reportados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante 2018 en México se comercializaron 17 mil 807 vehículos híbridos, híbridos conectables y eléctricos; de éstos, 201 fueron vehículos eléctricos; híbridos conectables 1,584 e híbridos 16,022.
La Ciudad de México fue la entidad que mayor número de adquisiciones registró con 35.1%; seguida del Estado de México con 15.6%; Jalisco 8.9%; Nuevo León 4.4%; Michoacán 4.1%; Querétaro 2.8%; Puebla y Guanajuato con 2.7%, respectivamente; Veracruz 2.0%; mientras que el resto de los estados se quedaron con el 21. 8% de las ventas totales de vehículos con estas tecnologías.

Sin embargo, las ventas de autos eléctricos en el país se mantienen por debajo del 1%; mientras que en otros países, como Estados Unidos, el porcentaje alcanza el 3 por ciento.
Es por ello que la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) señala que, para acelerar la introducción de las nuevas tecnologías, las cuales ya están disponibles para otros mercados, es necesario resolver la carencia de infraestructura como puntos de recarga, así como establecer un esquema para otorgar incentivos económicos a los consumidores, así como prerrogativas al uso de este tipo de vehículos.

De acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en México, el número de cargadores públicos para vehículos eléctricos no alcanza los 900 puntos, de los cuales, 125 están en la Ciudad de México.
También con datos de la CFE, señala que un vehículo eléctrico puede ahorrar entre 40 y 60% en consumo energético respecto a un auto convencional; mientras que el costo de mantenimiento puede ser alrededor de 26% más bajo.

Mientras que en otros países se habla de subsidios para aquellos que busquen adquirir un auto eléctrico, en México los incentivos se limitan a la exención del pago del Impuesto sobre Automóviles Nuevos (ISAN), la tenencia y el programa de verificación vehicular. En la Ciudad de México las placas verdes tienen un costo 50% más económico. Cabe mencionar que un vehículo eléctrico en México oscila entre los 320 mil y los 4 millones de pesos.
Entre las compañías comerciales que ya cuentan con vehículos eléctricos en el mercado nacional están BMW con su modelo i3; Chevrolet Bolt EV; Nissan Leaf; Toyota Prius; Kia Niro; Toyota Camry y Renault Twizy

Tabla
Costos de Dynamach e-motors:
Scooter $38,879
Mantis $34,200
Va-llenita (foodtruck) $180,000
Nano $127,000
Dragfly $96,900