Malasa Mex desarrolla a proveedores
La compañía busca fortalecer su cadena de suministro en el país
Para Malasa, la proveeduría nacional es fundamental y le apuesta al desarrollo de empresas locales, con el objetivo de fortalecer su cadena de suministro, reducir tiempos de entrega y fomentar la economía nacional.
Jennifeer García Paredes, auxiliar de compras de Malasa Mex, platicó que actualmente un 60% de la proveeduría es nacional y el 40% corresponde a importaciones, principalmente de España.
“Se han sustituido aproximadamente 20 tipos de insumos, desde empaques hasta piezas mecánicas, han sido sustituidos con éxito por productos nacionales”, subrayó.
Las actividades que realiza la empresa para elegir a sus proveedores mexicanos y extranjeros son análisis comparativos, visitas a planta, auditorías de calidad y se revisan capacidades logísticas y técnicas.
“También evaluamos el cumplimiento normativo y la sostenibilidad de sus prácticas”, puntualizó la auxiliar de compras de Malasa, quien añadió que buscan proveedores de directos e indirectos, para suministrar la planta ubicada en el estado de Querétaro.
“Buscamos tanto insumos directos como indirectos. Por ejemplo: materias primas (MDF, madera maciza, HPL), componentes, empaques, mantenimiento industrial, herramientas y servicios especializados”, detalló.
García agregó que el proceso de selección de proveedores de la compañía en México inicia con una convocatoria o búsqueda activa, seguida de una evaluación documental, cotización y finalmente pruebas de producto o servicio.
En este proceso Malasa evalúa la calidad, cumplimiento en tiempos de entrega, capacidad de producción, costos, servicio al cliente, sostenibilidad, cumplimiento de normas y certificados.
“Contar con experiencia comprobada, capacidad de respuesta, sistema de gestión de calidad y disponibilidad para auditorías, es indispensable para proveer a Malasa”, comentó la especialista.
Para definir qué empresa proveedora es la mejor elección, se toma en cuenta el cumplimiento constante de los estándares de calidad, entrega puntual, flexibilidad ante cambios, precios competitivos y excelente comunicación.
García explicó que algunos de los retos que enfrenta en materia de proveeduría son la variabilidad en calidad, capacidad limitada para escalar la producción y tiempos de respuesta extensos en algunos casos.
Por último, consideró a la proveeduría nacional como capaz, rentable y adecuada para las necesidades de Malasa.
“La consideramos capaz y con gran potencial. Es rentable, especialmente al reducir costos logísticos y facilitar el contacto directo. (Hemos visto) compromiso, flexibilidad, innovación, rápida adaptación a requerimientos, y deseo genuino de crecer junto con sus clientes”.